La Iglesia Católica despide a monseñor Víctor Manuel Ochoa Cadavid

La Iglesia Católica despide a monseñor Víctor Manuel Ochoa Cadavid

Con profundo pesar, la Iglesia Católica en Colombia despidió a uno de sus pastores más entregados y queridos, monseñor Víctor Manuel Ochoa Cadavid, quien falleció el domingo 1 de junio a las 11:55 p. m., luego de varias semanas en delicado estado de salud.

El actual Obispo Castrense de Colombia será recordado por su incansable labor pastoral, su cercanía con los fieles y su firme compromiso con la formación sacerdotal y la justicia social. Así lo expresó el Obispado Castrense en un comunicado oficial, resaltando la huella profunda que dejó en la vida eclesial y social del país.

La Conferencia Episcopal de Colombia (CEC) también manifestó su dolor ante esta partida, elevando oraciones por su eterno descanso y reafirmando la esperanza cristiana en la resurrección. “Recordamos con gratitud su entrega pastoral, su amor por la Iglesia y su servicio generoso a lo largo de casi cuatro décadas de ministerio”, expresó la CEC.

Nacido en Bello, Antioquia, el 18 de octubre de 1962, monseñor Ochoa inició su camino vocacional en el Seminario Conciliar de Medellín y luego se trasladó a Roma, donde obtuvo un doctorado en Filosofía en la Pontificia Universidad Santo Tomás de Aquino. Su ordenación sacerdotal se dio el 5 de julio de 1986 por el Papa San Juan Pablo II, en una ceremonia que marcó profundamente su vida espiritual.

A lo largo de su trayectoria, se desempeñó como formador de seminaristas, colaborador de la Comisión Pontificia para América Latina y ocupó diversos roles en la Arquidiócesis de Medellín y en instancias vaticanas. En 1995 fue nombrado Capellán de Su Santidad, un título que reconocía su dedicación ejemplar al servicio de la Iglesia.

Más allá de sus títulos, monseñor Ochoa fue un pastor cercano, un hombre culto, de profundas convicciones espirituales y humanas. Su amor por la naturaleza —especialmente por las orquídeas— reflejaba su capacidad de contemplación y su profunda conexión con la creación.

No Su legado perdurará en quienes lo conocieron y en la Iglesia que tanto amó y sirvió.

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