La Corte Suprema de Justicia ha abierto una nueva línea de investigación que involucra al expresidente Álvaro Uribe Vélez, relacionada con un vuelo realizado en febrero de 2018 durante una campaña electoral del Partido Centro Democrático. Según informó Uribe a través de su cuenta en X, el vuelo tenía como objetivo visitar sitios estratégicos en el Meta para apoyar las campañas electorales al Congreso y para la consulta de candidato presidencial.
El foco de la investigación recae sobre la identidad del piloto que realizó el vuelo: Samuel David Niño, un joven fallecido en 2019 cuya muerte, ocurrida en Guatemala, ha sido vinculada por algunos medios a presuntos nexos con el narcotráfico. Aunque informes de prensa han sugerido esta conexión, la familia de Niño y el propio Uribe han rechazado dichas afirmaciones, señalando que el piloto formó parte de una operación organizada por los candidatos del Meta a través de la empresa Llanera de Aviación, actualmente conocida como Navir Air.
En declaraciones, Uribe enfatizó que Samuel David Niño nunca fue considerado su piloto de confianza, y que el exmandatario únicamente lo conoció por su relación con Hernán Gómez Niño, candidato a la gobernación del Meta en 2015. El expresidente subrayó que ni él ni su partido tenían conocimiento previo de cualquier vínculo del piloto con actividades ilícitas, y afirmó que las noticias sobre dicha vinculación surgieron a raíz del accidente ocurrido en noviembre de 2019.
La nueva investigación se suma a otros procesos judiciales en curso contra el expresidente, incluyendo aquellos relacionados con presunto fraude procesal y soborno a testigos. La Corte Suprema ha tomado cartas en el asunto, y la investigación se encuentra en etapas preliminares, a la espera de más detalles y el desarrollo de las diligencias correspondientes.
Este caso añade otro capítulo a la compleja situación legal que enfrenta Uribe, quien continúa siendo una figura controvertida en la política y la justicia colombiana.
